El paseo nos ha deparado las siguientes observaciones:
Justo en el borde del páramo y cercano de uno de los caminos de acceso desde Palencia, se encuentra un gran vivar de conejos con muchas entradas. Ya cerca de la puesta de sol, se podían observar varios conejos en el exterior de las madrigueras. Se me antoja un lugar ideal para observar a estos lagomorfos.
Así mismo, en el interior del monte también pudimos observar varios conejos aislados.
En la zona más abierta de la finca, ocupada esta por tierras de cereal (en esta fecha ya rastrojos), hemos podido observar un gran rebaño de corzos distribuidos por toda la finca. Machos, hembras y corcinos, se afanan sin preocupación por nuestra presencia en alimentarse de los rastrojos del cereal. He podido contabilizar unos 49 corzos.
Mucho más cercano al caserío de la finca, un gran rebaño agrupado de unos 50 ciervos hacen lo propio al igual que los corzos. con mis prismaticos me da la sensación de que todo son hembras salvo unos 5 grandes machos que ya exhiben en todo su esplendor sus cuernas.
Tanta concentración de cérvidos en un espacio tan pequeño, me ha hecho pensar por unos instantes que me encontraba en los grandes espacios abiertos de la sabana Africana, donde antilopes y gacelas se extienden por doquier.
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