domingo, 21 de febrero de 2010

Canal de Castilla, una tarde de invierno

20 de Febrero de 2010:

Este Sábado por la tarde pude salir a dar una vuelta rápida para despejarme un poco y matar el mono de ganas de monte que tengo últimamente por no poder salir demasiado. La tarde estaba fría y con un poco de viento. En el cielo, más nubes amenazantes que claros, pero cuando el sol conseguía encontrar un hueco, la luz que irradiaba pintaba de tonos dorados cualquier escena.

Me dirigí a una zona del Canal de Castilla al norte de la capital Palentina para recorrer sus riberas y algunas de sus charcas.
El propio agua del canal era un espejo con sus aguas cristalinas como pocas veces y reflejaba los colores del cielo a la perfección, dando al paisaje esos tonos de color que le suele faltar en pleno invierno.
Ya en el propio canal y nada más bajarme del coche, un Zampullín chico que descansaba en medio del curso de agua, se sumergió para buscar refugio en la orilla y nunca más aparecer.
Por otro lado, las riberas de esta misma zona suelen acoger numerosos pajarillos, pero hoy, quizás por la hora, no se veía mucho movimiento. Tan solo un grupo de unos cuatro mitos, un carbonero común, un herrerillo común, varios jilgueros y un par de mirlos se dejaron ver. En el aire un milano real levantado de la alameda y un azor que cruzó el cielo como una bala perdiéndose en la espesura.

Avancé un poco con mi coche por uno de los caminos embarrados de este lugar y me topé con un cernícalo común que después de cernirse unos segundos se tiró sobre una alfalfa en busca de algo que no pude ver (demasiado lejos incluso para el digis).
Tres cornejas negras rebuscaban entre los terrones de una tierra arada algo que llevarse al pico. no podía ver muy bien de lo que se trataba, pero en una de las fotos que saqué se observa como una semilla de color rosa de tamaño considerable. Es como esos granos de cereal que se utilizan para la siembra, pero en este caso es más grande y no tengo ni idea de que se trata. Si alguien tiene una pista agradecería la información.
Un poco más adelante y en una zona querenciosa para ellos, un grupito de unos 6 cormoranes grandes descansaban el las ramas de los chopos a orillas del río.
Muy cerca de allí, en una zona de agua remansada me topé con una pareja de zampullines chicos. La foto no es buena pero sirve de documento gráfico de la cita.
Me acerqué hasta una de las charcas del canal que este invierno tan lluvioso ha conseguido llenar tras muchos años con no demasiada agua.
En ella, varias fochas, un nutrido grupo de ánades reales, algunos ya emparejados y otros descansando en una pequeña isleta de maleza en mitad del humedal.
También aproximadamente una docena de cercetas comunes muy asustadizas, de las cuales solo pude sacar a este macho mucho más lejos de lo que me hubiese gustado. Este ave es una mis especies de patos favorita.
Al llegar a la charca, levantó el vuelo un grupo de unos 55 ansares comunes que estaban tumbados en las tierras lindantes con el humedal y varios minutos después, la formación volvió al humedal y pude captar en imágenes su aterrizaje.
Primero se aproximan a cierta altura y comienzan a dar vueltas sobre el agua.
Después, la formación se rompe y los gansos comienzan a hacer picados para perder altura. Quien haya visto alguna vez a un grupo de gansos hacer picados, se habrá dado cuenta que no los hacen como por ejemplo las rapaces, que pliegan sus alas y se inclinan de cabeza para caer del cielo, sino que con las alas abiertas giran su cuerpo noventa grados y caen como si fueran piedras (poco elegante pero muy efectivo). La formación, perfecta hasta ese momento, parece ahora explotar.
Con la suficiente altura ya perdida, planean ahora todos juntos en un suave descenso hacia el lugar elegido para posarse.
Finalmente, como si de harriers se tratase, sacan sus trenes de aterrizaje y se posan delicadamente en el suelo.
En la siguiente imagen podeis ver el bando ya posado de nuevo.
Dejé la charca, no si antes aprovechar la luz magnífica que la tarde me ofrecía.
Cerca de Amusco, en una tierra de barbecho me encontré con al menos tres ratoneros comunes jóvenes que no recelaban demasiado y una cigüeña blanca, ambas especies empeñadas en capturar topillos.
De la cigüeña subo esta foto de un lance fallido pero que levanto bastante tierra y que se observa entre su pico.
De los ratoneros subo dos. Observar que las mejillas son más claras que en los ejemplares adultos.
En esta otra la luz está un poco forzada por utilizar la medición de luz puntual, ya que estaba casi a contraluz. Ya me gustaría a mi poder decir a los pájaros, espera un poquitito majete.....que me pongo del otro lado para sacarte guapo...
De paso por la carretera cerca de Amusco, una garza real en una alfalfa y una hembra de aguilucho pálido peinando los campos.

Ya era tarde avanzada y decidí subir al castillo de Monzón para finalizar la jornada y disfrutar de las vistas que ofrece.
Antes de marcharme definitivamente a casa, una foto del castillo con el sol cerca del ocaso.
Espero que os haya gustado.

3 comentarios:

Carlos N. G. Bocos dijo...

Jelou M.A.!

Alguna de las fotillos es un HDR?

Jose Angel Alonso dijo...

Esa esclusa a mi me gusta mucho. No por la parte natural, si no por el lado de la obra civil.

Salu2

Miguel Ángel Madrid dijo...

Hola Carlos;

Efectivamente, algunas de las fotos son HDR.